miércoles, 15 de mayo de 2013

¿Puede un cristiano mentir cuando se trate de un asunto de vida o muerte? ¿No fue la mentira de Rahab un caso parecido?


HNO JULIO SALUDOS,QUIERO PREGUNTARLE SI NOS ES LICITO MENTIR EN OCASIONES,UNA DE ELLAS ES SI HAY PELIGRO DE MUERTE,O PARA SALVAR LE VIDA DE ALGUIEN COMO LO HIZO RAHAB, AGRADEZCO SU RESPUESTA,BENDICIONES. JAVIER (Facebook).

Apreciado hermano Javier, gracias por enviarnos su pregunta.
Es necesario iniciar respondiendo que la ley de Dios prohíbe tajantemente la mentira: “No hablarás contra tu prójimo falso testimonio” (Éx. 20:16). La santa Ley de Dios es una manifestación de su carácter, por esa razón él no puede mentir (1 S. 15:29; Tit. 1:2), en consecuencia, siendo que los creyentes somos llamados a ser santos así como él es santo (Lev. 11:45; 1 P. 1:16), la mentira no debe estar en nuestros labios: “No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despodajo del viejo hombre con sus hechos” (Col. 3:9). Los que practican la mentira no entrarán a la Nueva Jerusalén que Dios tiene preparada para sus santos (Ap. 21:27; 22:15).
La mentira es un pecado horrible porque “esencialmente la mentira es una afirmación de lo que es falso con intención de engañar (Jue. 16:10, 13)[1] Sus fines son malvados: hacer fraude, inculpar injustamente a otros, enseñar la falsa doctrina. Jesús dijo que el padre de la mentira es Satanás (Jn. 8:44).
Ahora, respecto a la mentira de Rahab (Josué 2), como un posible fundamento para justificar las mentiras, en caso de que fuera necesario hacerlo con el fin de salvar la vida, es necesario aclarar lo siguiente: Rahab era una mujer pagana, vivía en medio de un pueblo enceguecido por el pecado. Dios la había escogido para ser una heroína de la fe (Heb. 11:31) y miembro del pueblo santo, pero, en el momento en el cual recibe a los espías, ellá aún estaba en oscuridad. El Señor ya estaba inclinando su corazón para amar al pueblo de Israel, pero aún no era una creyente. De manera que ella, en su deseo de ayudar al pueblo santo, mintió. Ahora, la pregunta que algunos se hacen es: ¿Por qué Dios usó la mentira de una mujer para proteger a los espías? Bueno, Dios no se complace en el pecado ni en las mentiras, pero, nuestro Dios, en el ejercicio de su Soberanía puede, y en efecto lo hace, usar las acciones pecaminosas de los hombres para sus propios fines. Por ejemplo, Dios usó la envidia de los hermanos de José para enviarlo a Egipto y luego proteger a la familia que se convertiría en el pueblo de Israel (Vosotros pensasteis mal contra mí, más Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo. Gén. 50:20). De la misma manera Dios usó algunas acciones pecaminosas de los hombres para cumplir sus santos propósitos. Pero esto no significa que Dios se gozó en las acciones malas, o que él las apruebe, de ninguna manera. Todos ellos sufrieron las consecuencias de sus maldades, aunque Dios las usó para el bienestar de su pueblo.
De manera que la mentira no es aprobada por Dios, aún ni en el caso de Rahab.
Pero, algunos teólogos y hermanos, con sinceridad se hacen estas preguntas:
¿Deberá mentir un creyente cuando un asesino está buscando a su hijo o a otra persona que ha buscando refugio en su casa, y le preguntan si la persona está allí? ¿Qué maldad, fraude, injusticia, perjuicio hay en ello?
Creo que si un día nos enfrentamos con una situación tan difícil el Señor nos ayudará a decir o hacer lo que procure Su gloria, la santidad y el bienestar de nosotros y del prójimo, así como el juicio de los malvados.
 
Su servidor en Cristo,
Julio César Benítez
 
Nota: Usted puede ver la respuesta a esta y otras preguntas ingresando a: http://forobiblico.blogspot.com/


[1] Bruce, F.F. Nuevo Diccionario Bíblico Certeza. Página 876